En la gestión industrial moderna, tomar decisiones basadas en datos ha dejado de ser un diferencial para convertirse en una necesidad. El avance de la digitalización y el uso intensivo de sensores y algoritmos han permitido que el mantenimiento también evolucione: de una simple respuesta a fallas a la recomendación automatizada de acciones, basadas en análisis predictivos. Es en este contexto donde surge el mantenimiento prescriptivo.
Más allá de predecir fallas futuras, el mantenimiento prescriptivo indica qué hacer, cuándo hacerlo y cómo actuar ante una anomalía detectada. Para ello, se utilizan inteligencia artificial, aprendizaje automático y modelos analíticos que transforman grandes volúmenes de datos en decisiones prácticas. Así, es posible reducir intervenciones innecesarias, aumentar la confiabilidad de los activos y optimizar los recursos de mantenimiento.
En este artículo, explicamos qué es el mantenimiento prescriptivo, cómo funciona en la práctica y cuáles son sus beneficios en diferentes tipos de activos industriales. También lo comparamos con otros enfoques (correctivo, preventivo y predictivo), y mostramos cómo los sensores, las plataformas integradas y los algoritmos pueden transformar la forma en que su planta realiza el mantenimiento.
¿Qué es el mantenimiento prescriptivo?
El mantenimiento prescriptivo es un enfoque avanzado de mantenimiento basado en datos, que utiliza inteligencia artificial (IA) y aprendizaje automático (machine learning, ML) no solo para predecir fallas, sino también para recomendar acciones correctivas específicas. Esta estrategia interpreta tendencias, patrones y desviaciones operativas para indicar qué hacer, cuándo intervenir y cuál es la mejor acción a tomar para evitar fallas o pérdidas de rendimiento.
La diferencia entre el mantenimiento predictivo y el prescriptivo radica en la profundidad del análisis y en la capacidad de recomendación automatizada. Mientras que el mantenimiento predictivo identifica comportamientos anómalos y anticipa posibles fallas con base en datos históricos y en tiempo real, el prescriptivo va más allá. Aplica modelos analíticos capaces de simular escenarios, calcular impactos y definir el mejor curso de acción ante un problema identificado. En otras palabras, el predictivo responde qué está ocurriendo con la máquina, mientras que el prescriptivo orienta sobre qué hacer al respecto de una posible falla.
Para ello, el mantenimiento prescriptivo depende de algoritmos entrenados con grandes volúmenes de datos operativos, combinando variables como vibración, temperatura, corriente eléctrica, entre otras. De esta forma, la IA reconoce patrones, clasifica eventos, aprende de fallas pasadas y evoluciona continuamente, ofreciendo recomendaciones cada vez más precisas y personalizadas para cada tipo de activo.
Por lo tanto, este enfoque es esencial en plantas industriales con alto volumen de datos y múltiples activos críticos. Al automatizar parte del proceso de toma de decisiones, el mantenimiento prescriptivo reduce el tiempo entre la detección y la intervención, aumentando la eficiencia operativa y fortaleciendo la confiabilidad de los equipos.
¿Cómo funciona el mantenimiento prescriptivo en la práctica?
El mantenimiento prescriptivo funciona a partir de una arquitectura tecnológica integrada que conecta sensores inteligentes, plataformas analíticas y algoritmos avanzados para transformar datos operativos en decisiones automatizadas y precisas. El proceso involucra cuatro etapas principales:
1. Recolección continua de datos
Todo comienza con el monitoreo continuo de los activos mediante sensores IoT. Estos dispositivos capturan variables como vibración, temperatura, corriente eléctrica y presión en tiempo real. La riqueza y frecuencia de estos datos son esenciales para alimentar los modelos predictivos y permitir diagnósticos sensibles incluso ante variaciones sutiles de comportamiento.
2. Aplicación de modelos analíticos y predictivos
Luego, los datos recolectados son analizados por modelos estadísticos y algoritmos de machine learning entrenados para detectar patrones y anomalías. Es decir, esta etapa es similar al mantenimiento predictivo: el sistema identifica desviaciones respecto al comportamiento considerado normal y estima la probabilidad de falla.
3. Generación de recomendaciones automatizadas
La diferencia del mantenimiento prescriptivo surge en esta fase. Al identificar una falla potencial, el sistema no solo genera una alerta, sino que también recomienda acciones específicas. Por ejemplo, reemplazar un componente en un intervalo de tiempo definido, ajustar parámetros operativos o activar un equipo técnico. Así, estas recomendaciones se basan en historiales de fallas, consecuencias previstas y simulaciones de escenarios, garantizando una mayor precisión.
4. Integración con plataformas de gestión de activos
Por último, el mantenimiento prescriptivo se conecta con sistemas de gestión de activos (EAM/CMMS), lo que permite que se generen órdenes de trabajo automáticamente con base en las recomendaciones del algoritmo. De esta manera, es posible reducir el tiempo de respuesta, mejorar la planificación de recursos y estandarizar el proceso de toma de decisiones, ampliando el impacto positivo de la estrategia.
Así, el mantenimiento prescriptivo combina datos, tecnología e inteligencia analítica para anticipar fallas y orientar acciones correctivas, elevando el nivel de madurez del mantenimiento industrial.
¿Qué se necesita para implementar el mantenimiento prescriptivo?
La implementación del mantenimiento prescriptivo requiere más que solo la adquisición de tecnologías. Se trata de un cambio estructural que involucra datos de calidad, herramientas analíticas robustas y equipos capacitados. A continuación, se detallan los principales requisitos para una adopción eficaz:
Infraestructura de sensores y gateways
La base del mantenimiento prescriptivo está en la recolección continua de datos. Para ello, se necesita un ecosistema confiable de sensores capaces de monitorear variables como vibración, temperatura, corriente eléctrica y lubricación. Además, estos sensores deben estar integrados a gateways industriales, que aseguren la transmisión automatizada y segura de los datos hacia la plataforma central, eliminando etapas manuales y optimizando el flujo de información.
Plataforma con capacidad de análisis predictivo y prescriptivo
Además de la infraestructura física, es esencial contar con una plataforma digital que vaya más allá del monitoreo. De esta forma, el mantenimiento prescriptivo depende de algoritmos capaces de identificar patrones, prever fallas y sugerir acciones correctivas basadas en datos históricos y en tiempo real.
Datos históricos y entrenamiento de modelos
El mantenimiento prescriptivo depende fuertemente de la calidad y consistencia de los datos. Por lo tanto, es necesario contar con un historial confiable de eventos de falla, condiciones operativas e intervenciones realizadas. Estos datos alimentan los modelos analíticos, que utilizan técnicas de machine learning para reconocer patrones y generar recomendaciones precisas. Así, cuanto más robusta sea la base histórica, más precisos serán los diagnósticos y las sugerencias automatizadas.
Capacitación del equipo
Por último, la transición hacia el mantenimiento prescriptivo exige que técnicos, ingenieros y gestores estén preparados para interpretar datos, validar recomendaciones generadas por IA y tomar decisiones basadas en evidencia. Para ello, se requieren capacitaciones en análisis de datos, integración con otras áreas (como producción, por ejemplo) y dominio de las herramientas tecnológicas adoptadas.
Es decir, la cultura de la confiabilidad debe reforzarse para que el equipo actúe de forma estratégica y proactiva.
¿Cuáles son los beneficios del mantenimiento prescriptivo?’
El mantenimiento prescriptivo representa un avance significativo respecto a los enfoques tradicionales. A continuación, se destacan los principales beneficios del mantenimiento prescriptivo:
Toma de decisiones basada en datos
Al emplear algoritmos avanzados, el mantenimiento prescriptivo elimina suposiciones y juicios subjetivos. El análisis predictivo, asociado a recomendaciones automatizadas, permite que las decisiones técnicas se tomen con base en evidencias concretas, como historiales de fallas, condiciones operativas en tiempo real y simulaciones probabilísticas. De este modo, tu empresa fortalece la confiabilidad de las intervenciones y reduce el error humano.
Reducción de costos por fallas y mantenimientos innecesarios
Con recomendaciones basadas en datos, es posible intervenir solo cuando existe un riesgo real de falla, evitando reemplazos prematuros y paradas correctivas inesperadas. Esto permite reducir el desperdicio de componentes, optimizar el uso de la mano de obra y prevenir daños colaterales, todo con un impacto directo en la reducción del costo por activo y en el retorno sobre la inversión (ROI).
Aumento del MTBF y de la disponibilidad operativa
Al anticipar fallas e indicar el momento más adecuado para intervenir, el mantenimiento prescriptivo contribuye directamente a aumentar el tiempo medio entre fallas (MTBF). Además, al reducir la cantidad y duración de las paradas, mejora la disponibilidad de los activos, haciendo que la planta sea más productiva y resiliente.
Acciones más rápidas y eficaces
La gran diferencia del mantenimiento prescriptivo es la generación de recomendaciones automatizadas. En lugar de depender exclusivamente del análisis humano, la tecnología sugiere acciones basadas en bases de datos y aprendizaje automático, garantizando agilidad y precisión. Esto reduce el tiempo de respuesta y facilita la estandarización de procedimientos.
Integración entre áreas y estandarización de respuestas
Al centralizar datos, análisis y recomendaciones en una única plataforma, el mantenimiento prescriptivo facilita la comunicación entre áreas como mantenimiento, operaciones e ingeniería. Como resultado, las acciones dejan de depender de la experiencia individual y pasan a seguir criterios técnicos definidos, promoviendo alineación, trazabilidad y mejora continua.
Ejemplos de aplicación del mantenimiento prescriptivo
El mantenimiento prescriptivo es especialmente eficaz en activos industriales con alta criticidad operativa, complejidad técnica o elevado costo en caso de falla. A continuación, se presentan ejemplos de su aplicación en distintos tipos de equipos:
Motores eléctricos
En motores de accionamiento, los sensores se instalan directamente en el cuerpo del equipo para monitorear vibración y temperatura, mientras que los sensores de corriente se colocan en el panel eléctrico. Estos datos se recolectan de forma continua y son analizados por algoritmos que detectan patrones anómalos, como aumento de vibración en una frecuencia específica, variaciones térmicas fuera de lo normal o picos de corriente.
De este modo, la plataforma prescriptiva interpreta estas anomalías y recomienda, por ejemplo, el reemplazo del rodamiento antes de que falle, la verificación de un desbalanceo en el rotor o la inspección del sistema de ventilación. Así, el equipo de mantenimiento actúa de forma proactiva, durante una ventana programada, evitando paradas inesperadas del equipo.
Compresores industriales
Los compresores operan con múltiples variables críticas —presión, vibración, temperatura y consumo energético—. Por ello, sensores ubicados en puntos como el cabezal, la carcasa y la línea de descarga permiten monitorear el rendimiento térmico y mecánico en tiempo real.
Al detectar, por ejemplo, un aumento anormal de temperatura combinado con una variación en el patrón de vibración, el sistema prescriptivo puede indicar una inspección inmediata para verificar desgaste en válvulas o acumulación de residuos internos. Si los síntomas persisten, la recomendación puede escalar a una parada planificada con sustitución de componentes, evitando fallas graves o interrupciones en la producción.
Ventiladores y extractores
Estos activos, que suelen operar de forma continua, se monitorean mediante sensores de vibración y temperatura ubicados en los cojinetes y cerca de los motores. El análisis prescriptivo identifica desviaciones que pueden indicar desalineación, acumulación de polvo en las aspas o juego mecánico, y prescribe las acciones que el operador debe realizar para corregir el problema.
Por ejemplo, si la vibración aumenta gradualmente y supera los límites predefinidos, la plataforma recomienda un balanceo dinámico o una limpieza preventiva. El equipo de mantenimiento, entonces, programa la intervención sin necesidad de detener la operación a modo de emergencia, manteniendo la confiabilidad del sistema de ventilación.
Estos ejemplos demuestran cómo el mantenimiento prescriptivo se aplica a distintos contextos operativos, con foco en el rendimiento, la seguridad y la eficiencia económica.
¿Cuál es la diferencia entre mantenimiento correctivo, preventivo, predictivo y prescriptivo?
En el mantenimiento industrial, diferentes enfoques coexisten según la madurez técnica de la planta, la criticidad de los activos y los recursos disponibles. Comprender las diferencias entre los tipos de mantenimiento —correctivo, preventivo, predictivo y prescriptivo— es esencial para adoptar una estrategia coherente con los objetivos operativos.

En este sentido, el análisis comparativo evidencia que no existe un único enfoque ideal, sino estrategias complementarias que deben aplicarse según el contexto de cada activo.
Sin embargo, avanzar hacia modelos predictivos y prescriptivos representa un salto en madurez técnica y confiabilidad, siendo fundamental para plantas que buscan la excelencia operativa y una reducción sostenible de costos.
¿Cuándo aplicar cada una?
- Mantenimiento correctivo: se recomienda para activos de baja criticidad o sistemas redundantes, en los que una falla no compromete la producción, la seguridad ni otros equipos. Sin embargo, debe aplicarse con precaución, ya que está asociado a paradas inesperadas y costos de emergencia.
- Mantenimiento preventivo: se realiza en intervalos fijos de tiempo o uso (horas de operación, ciclos, kilometraje). Es adecuado para equipos con fallas previsibles y bien documentadas, siempre que no implique reemplazos innecesarios o intervenciones prematuras.
- Mantenimiento predictivo: recomendado para activos críticos, donde es necesario anticipar fallas mediante monitoreo continuo. Es ideal cuando se cuenta con sensores, datos históricos y un equipo capacitado para interpretar las condiciones reales de operación.
- Mantenimiento prescriptivo: debe implementarse en entornos con mayor madurez digital y un volumen robusto de datos. Es indicado para plantas que buscan automatizar decisiones, optimizar recursos y estandarizar intervenciones con el apoyo de inteligencia artificial en el mantenimiento.
Evolución por nivel de madurez
La transición entre los tipos de mantenimiento suele reflejar el avance tecnológico y organizacional de la planta. Esta evolución se describe en modelos consolidados como el Maintenance Maturity Model, originalmente estructurado por Winston Ledet (1999). Con base en este modelo, es posible dividir la madurez en cuatro niveles de mantenimiento industrial:
- Fase inicial: predomina el mantenimiento correctivo, con acciones reactivas y enfoque en mantener la operación en funcionamiento.
- Fase intermedia: se adoptan planes preventivos e inspecciones periódicas, buscando mayor previsibilidad.
- Fase avanzada: se utilizan sensores y plataformas para análisis predictivo, basados en datos recolectados en tiempo real.
- Fase prescriptiva: se integran datos, inteligencia artificial y aprendizaje automático para automatizar diagnósticos y recomendar acciones específicas, promoviendo confiabilidad y reducción de costos.
Por lo tanto, esta evolución no ocurre de forma lineal ni simultánea para todos los activos. Muchas plantas adoptan estrategias híbridas, utilizando diferentes enfoques según la criticidad y el estado de cada equipo.
Preguntas Frecuentes (FAQ)
¿El mantenimiento prescriptivo reemplaza al predictivo?
No. El mantenimiento prescriptivo complementa al predictivo. Mientras que el predictivo identifica fallas incipientes basándose en datos y tendencias, el prescriptivo va más allá, recomendando automáticamente las mejores acciones a tomar. Así, ambos forman parte de un plan de mantenimiento avanzado, con el prescriptivo actuando como una evolución en el uso de datos para decisiones más rápidas y asertivas.
¿Qué tecnologías son esenciales?
Sensores inteligentes, gateways industriales, plataformas con algoritmos de aprendizaje automático (machine learning) e inteligencia artificial son fundamentales. Además, la integración con sistemas de gestión de activos (EAM/CMMS) es necesaria para operacionalizar las recomendaciones y generar planes de acción automatizados.
¿Toda planta puede aplicar mantenimiento prescriptivo?
En teoría, sí. Sin embargo, la viabilidad depende de la madurez técnica de la planta, del volumen y la calidad de los datos disponibles, y de la infraestructura tecnológica. En entornos con activos críticos y alta exigencia de disponibilidad, el prescriptivo ofrece un mayor retorno. En cambio, en operaciones con baja criticidad o sin una digitalización mínima, la adopción debe ser gradual.
¿Es necesario un gran volumen de datos para aplicar el mantenimiento prescriptivo?
Sí, la eficacia del mantenimiento prescriptivo depende de una base de datos robusta y bien estructurada. Los modelos prescriptivos requieren registros históricos de fallas, condiciones operativas e intervenciones para entrenar los algoritmos con precisión. Sin embargo, es posible comenzar con datos básicos e ir ampliando el alcance a medida que evoluciona la madurez de la estrategia.
¿La inteligencia artificial realmente decide las acciones de mantenimiento?
La inteligencia artificial en el mantenimiento sugiere acciones basadas en patrones históricos y análisis predictivos, pero la decisión final aún depende de la validación técnica del equipo. La IA actúa como un sistema de apoyo a la toma de decisiones, optimizando el tiempo de respuesta y reduciendo errores humanos, pero sin reemplazar completamente el juicio técnico especializado.
¿Cómo contribuye Dynamox a la evolución del mantenimiento industrial?
El mantenimiento prescriptivo representa la etapa más avanzada en la gestión de activos industriales. Al combinar monitoreo continuo, análisis assertivas e inteligencia artificial, permite tomar decisiones técnicas más rápidas, precisas y alineadas con los objetivos de confiabilidad operativa. En este contexto, Dynamox actúa como un socio estratégico para las industrias que desean avanzar hacia este nuevo nivel.
Nuestro ecosistema combina sensores IoT, gateways y una plataforma digital con algoritmos inteligentes. En conjunto, estas soluciones permiten:
- Recolección continua de datos sobre vibración, temperatura y corriente eléctrica;
- Generación automatizada de alertas y diagnósticos mediante inteligencia artificial (DynaDetect);
- Visualización centralizada del estado de salud de los activos (DynaNeo);
- Integración con sistemas de gestión (CMMS/EAM) para facilitar el cierre del ciclo de mantenimiento.
Con estas soluciones, Dynamox convierte datos brutos en insights accionables, ayudando a los equipos a priorizar intervenciones, evitar fallas y reducir costos operativos.
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