Los hidrociclones son equipos utilizados para separar sólidos de líquidos o líquidos de diferentes densidades. Este activo tiene un recipiente cilíndrico-cónico con un flujo de entrada tangencial en la parte superior, una salida en la parte inferior (el ápice o apex) a través del cual se elimina el material más denso o grande, si es sólido – la salida se llama descarga. Hay, además, una salida superior para eliminar el material menos denso o más pequeño – llamado el rebalse.
Los materiales se separan por la acción centrífuga que obliga al material más denso a dirigirse hacia la superficie exterior (saliendo por la parte inferior), mientras que el material menos denso migra hacia el centro del vórtice y se descarga por la parte superior.
En cuanto al funcionamiento de los hidrociclones, un punto de atención es la presión de entrada. Aunque otros factores, como el diámetro del cono e incluso el material, pueden interferir en el punto de corte, la presión es uno de los principales factores.
“El punto de corte o corte en la clasificación se refiere a la definición de la separación granulométrica de las partículas, que divide el material que pasa por el rebalse y el por la descarga.”
Esto se debe a que influirá en el punto de corte (o d50): si está por debajo del valor adecuado, el d50 será mayor de lo deseado. Del mismo modo, si la presión es superior al valor adecuado, el d50 será inferior al deseado.
Aplicación del hidrociclón
A pesar de la posibilidad de aplicación en diferentes sectores industriales, el hidrociclón se encuentra comúnmente en las industrias de procesamiento de minerales y de papel y celulosa.
Se instala en un circuito cerrado entre los trayectos de molienda y acondicionamiento para la flotación, y la alimentación se bombea a presión a través de la entrada tangencial, contribuyendo al movimiento de giro.
De este modo, el material que ya tiene el tamaño adecuado sigue el flujo de producción y el material demasiado grande vuelve al molino. El hidrociclón cierra así el ciclo de molienda. A veces puede haber incluso un segundo ciclón para separar los finos del material.
La eliminación del exceso de finos evita una serie de problemas de flotación, como los slimes coating (cuando las partículas finas se adhieren a la superficie de las más grandes), los cambios en la reología de la pulpa, que se vuelve más viscosa, el desbordamiento del tanque de flotación y el elevado consumo de reactivos.
Fallas en los hidrociclones
Fallas en los hidrociclones
Hay algunos problemas que son bastante comunes en este tipo de activos. Entre ellos se encuentran el bajo caudal de fluido, el bajo nivel del tanque, la presencia de aceite en el agua, los olores en el separador y una gran cantidad de residuos.
- Bajo caudal de fluidos: puede deberse a problemas con la bomba, agua insuficiente en el depósito, obstrucciones en la aspiración, filtros obstruidos o lubricantes inadecuados.
- Bajo nivel en el tanque: es importante comprobar que no haya obstrucciones en las tuberías y el filtro, limpiar los lodos del tanque de decantación y, sobre todo, ajustar la válvula reguladora de presión.
- Aceite en el agua: puede indicar que el sistema está sobrecargado o que el tanque de decantación está lleno. También puede haber obstrucciones en la descarga de agua.
- Presencia de olores en el separador: puede ser un indicio de lodos acumulados o agua estancada.
- Gran cantidad de residuos: este problema suele estar relacionado con filtros sucios o con la acumulación de lodos.
Estos problemas pueden detectarse mediante inspecciones (análisis visual, olfativo y auditivo de los activos). Para ello, las inspecciones deben realizarse periódicamente a fin de evitar el agravamiento de situaciones que pueden convertirse en fallas graves.
Para saber más, lee: Ruta de inspección sensitiva: todo lo que debes saber
La posibilidad de utilizar los sentidos humanos para evaluar el estado de los equipos, cuando se utiliza estratégicamente, puede marcar la diferencia en la gestión de activos. Es decir, con la guía y dirección de los conocimientos del inspector, es posible identificar una serie de anomalías, o incluso servir como doble control de las señales de falla indicadas por el software, como el Módulo de Gestión Visual de Dynamox.
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